Historia de un Santo San Luis Orione

El sacerdote Juan Luis Orione nació en Pontecurone, Diócesis de Tortona, el 23 de junio de 1872. Hijo de Víctor y Carolina Feltri. Sintió precozmente la vocación religiosa. Entró con los Franciscanos menores de Voghera donde fue desahuciado por salud. Pasó al oratorio salesiano de Valdocco, en Turín, donde conoció a San Juan Bosco y asistió a su santa muerte.

A los diecisiete años entró en el seminario diocesano de Tortona. S.E. Monseñor Bandi lo consagro sacerdote el 31de abril de 1895. Siendo simple clérigo, movido y arrastrado por ejemplos de Don Bosco y del Cottolengo, lanzaba las bases de la «Pequeña Obra de la Divina Providencia».

Durante los terremotos de Mesina (1908) y Mársica (1915) se prodigó con admirable abandono de sí mismo. En Mesina ocupó el cargo de Vicario General. en 1912 formula los santos votos en las manos del Papa Pío X, durante una audiencia privada. Por dos veces viajó a América, la primera en 1920, la segunda en 1934 para visitar sus instituciones.

Concluyó su laboriosísima jornada en San Remo el 12 de marzo de 1940, a las 22:45 hrs., invocando por tres veces el nombre de Jesús antes de morir.

La caridad que quiere servir a Cristo especialmente en los humildes, en los enfermos, en los limitados mentales, en los afectados por las formas más repugnantes dentro de los males físicos y morales, constituye la fundamental característica de su obra, que despliega sus actividades en casas denominadas «Pequeños Cottolengos», los institutos de artes y oficios, en las escuelas gratuitas para el pueblo, en los asilos, en los internados, en las colonias agrícolas, con una sumisión absoluta al Papa, a los obispos y a todas las autoridades de la Santa Madre Iglesia, en el nombre de Jesucristo crucificado y bajo la protección de María Santísima, Madre de Dios, hacia la cual la Congregación profesa una tierna y filial devoción.

Para cumplir tan vasto programa cuidó con cariño la formación del personal religioso en aspirantados, noviciados y casas de estudio.

Unió a los Hijos de la Divina Providencia, las Pequeñas Hermanas Misioneras de la caridad y las Sacramentinas Adoratrices no videntes.

La Pequeña Obra de la Divina Providencia tiene obras esparcidas por todo el mundo, sumando en total 28 países. La casa matriz está en Tortona (Italia).

 

DON ORIONE EN CHILE

Después de un año de permanencia en Argentina quiere cumplir su sueño de fundar también en este rincón del mundo su «pequeña obra». El 28 de enero de 1936 escribe desde Buenos Aires: «Dentro de algunas horas saldré para Mendoza y, desde allá en avión, iré a Chile, sobrevolando Los Andes a la altura de unos 6.000 metros».

«Voy a ver las dos casas que nos han ofrecido: una en la capital, Santiago, y la otra, de acuerdo a cuanto me aseguran, amplia y muy bella, cerca de Valparaíso, a orillas del mar, con una capilla anexa».